En este sitio se encuentran dos rocas, ambas se asientan en la base de un claro al lado del río, en un espacio donde se abre una pared rocosa a modo de gran anfiteatro con paredón.

Una de estas rocas está girada (por razones desconocidas) y algunos grabados se esconden en su cara inferior, por lo que es complicado conocer la totalidad de sus representaciones.

En cuanto a los diseños, la primera roca posee un grupo de grabados sobre un panel liso, con motivos de líneas ondulantes y una cuadrícula pequeña. Ciertos motivos presentan surcos muy profundos, lo que les permite ser observados a distancia media.

A pesar de la proximidad entre las dos rocas, la segunda posee una iconografía diferente. En su parte inferior, se distingue un diseño de cruz delineada con dos perforaciones; en la parte posterior, muy desgastada, aún se puede apreciar una composición con motivos circulares complejos. Esta iconografía presenta similitudes con algunos motivos del sitio El Farallón. Sin embargo, otros motivos con surcos profundos consisten en diseños geométricos.

Al subir los niveles del agua por las lluvias, las rocas se cubren, por lo que presentan desgaste y vegetación cercana que las daña.